viernes, 22 de enero de 2016

Mesa de centro

Hola,
en la entrada de hoy os enseño una mesa de centro. Resulta que una compañera me comentó que iba a tirar una mesa  con las patas de hierro y plancha de mármol encima. Como no podía ser de otra manera, y siguiendo la filosofía de "aquí no se tira nada",  me quedé con ella.
Decidí no usar la plancha de mármol y ponerle un tablero a las patas.
Las patas son éstas....




Me limité a pintarlas en blanco. En la tienda de bricolaje del barrio compré a medida un tablero de dm y decidí forrarlo con hojas de libro.
No tengo fotos del proceso pero el caso es que fui forrando un lado y después decidí forrar el tablero entero para que fuera reversible. Sobre la marcha decidí  usar la cinta de carrocero para ponerle unos triángulos de colores por un lado, y por otro puse unas mariposas.
El resultado os lo enseño a continuación. Una vez terminado compré una plancha, creo que se llama policarbonato,  para proteger el tablero.








¿Qué os parece el resultado?
Pues con mi mesita de centro  me sumo un viernes más a los Findes Frugales de Marcela.
Muchas gracias por pasaros a visitarme.

jueves, 7 de enero de 2016

Empezamos el año con una mecedora

Hola,
he estado un poco holgazana con el blog durante estas navidades, así que me he visto "obligada" a aparecer de nuevo por aquí con un nuevo tuneo. La verdad es que estoy encantada de volver a la rutina, y dejar atrás tanto árbol, tanta iluminación navideña, tantas aglomeraciones y tanta comida.
Así que empezamos el año con una mecedora. Tengo que decir que no tengo la foto  de la mecedora cuando la compré; a veces me pasa que tengo tantas ganas de empezar con algo,  que me olvido de hacer la foto, una pena la verdad, pero lo he subsanado buscando por internet,  hasta que encontré una prácticamente igual a  la que yo adquirí en una tienda de segunda mano.




La rejilla del asiento estaba en perfecto estado, me limité a limpiar, lijar y pintar con un tono crudo,  decapando posteriormente. La rejilla la dejé igual. Para acabar, le di cera incolora.




Me gustó mucho el resultado, pero por falta de espacio no pude quedarme con ella y la puse en venta. Pronto se puso en contacto conmigo alguien que vino a verla, y le encantó; me contó que su mujer y él habían tenido un bebé y que quería una mecedora así para que ella pudiera dar el pecho al niño balanceándose en ella.  Y gracias a eso, he de reconocer,  que  me costó menos desprenderme de ella.

Espero que os guste el cambio, siento la mala calidad de las fotos. Muchas gracias por vuestras visitas y si queréis ponerme algún comentario, estaré encantada de  leerlos y conocer vuestra opinión.